XICHU, EL VERDE DE TUS OJOS, LA CANELA DE TU PIEL

Javier zapata castro

Xichu. Uno de los municipios del estado de Guanajuato. Realmente está poblado por un número reducido de habitantes, con todo y las rancherías que le son propias. El municipio está pintado de color verde, en todos sus matices, de ese verde que solo, y solo en la sierra se degusta en combinación perfecta con el canela perteneciente a los troncos de los arboles, a la misma tierra…aquello es una multiplicidad de tonos verdes y canelas, entremezclados en lo alto, medio y bajo de la sierra de xichu.

El poblado se encuentra rumbo al este de san Luis de la paz. Y a él, se llega por un camino sinuoso. Saliendo de una curva, solo para entrar en otra. A simple vista, se observan animales de pelo y pluma, que, corriendo o volando, atraviesan el camino. O Solamente se desplazan a su vera…por esos rumbos, a nadie extraña ver un encino caído. Atravesado a medio camino. Diciendo, por aquí no pasas…los hombres que vienen y van. De las camionetas sacan hachas o moto sierras, lo cortan, mueven y continúan su andar…’’sierra de xichu, debería decirse, más que municipio de xichu’’

El pueblo es, o era, -hace sus años que no lo veo-. Una sumatoria de callejuelas pueblerinas, entrelazadas, y que solamente pueden conducir a la plaza principal o al rio, ¿pues a donde más? Aquella comunidad pareciera un pueblo huasteco. En donde hace 40 años se podían ver parvadas de pericos. Más verdes que el verde mismo…la gente, es tanto o más bronca que la de Badiraguato, Sinaloa. El que no traía una pistola, era porque traía dos. Verdad buena que la sierra de xichu, caminos y municipio. Requiere de crónica tras crónica, de esas que se van rimando solas.

En cierta ocasión, debido a la feria del pueblo, la vendimia típica, cubría sus caminos-calles. Se preparaban los caballos para las carreras y se afilaban las navajas para las noches de palenque. El pueblo, pequeño, se encontraba lleno. Gente de comunidades del mismo municipio, muchas visitas. Xichu es un pueblo afamado, rico, de mucha tradición. Camionetas y mas camionetas, si, pero era más gente de a pie y a caballo en aquella celebración.

Allá, a un lado del rio. El que platica y 3 amigos, nos encontrábamos viendo a los peces saltadores, maromeros, alegres brincan fuera del agua, como gritando su presencia. Ahí estábamos entretenidos viendo el espectáculo de los peces brincones. Bajo 38 grados de temperatura, misma que aminorábamos con cerveza y caña. Si señor; sol, agua, espectáculo acuático, bebida. Y la sierra desbordando su belleza por los 4 puntos cardinales.

De pronto, como una ‘’aparición’’, vimos a una mujer que bajaba por una lomita cercana, ahí pegadita a nosotros, -destacándose como mosca en leche-. Rubia, cabello dorado jugando con el sol. Vestía blusa blanca, algo rasgada, falda-pantalón y botas charras…en la mano izquierda pretendía sostener un vaso de unicel. Se suponía con cerveza o alguna bebida. Le veíamos borrachita, con media estocada adentro…güera, acuerpada, borracha y bajando una lomita de la sierra. -Por aquellos entornos, bien podía traducirse en próxima muerte-. En cualquier momento.

Los 3 amigos que estaban conmigo viendo los peces saltadores. De inmediato se ofrecieron como chambelanes. 2 le tomaron de los brazos ayudándole a bajar. El Tercero se llevo la botella y le lleno el vaso. Todo fue cosa de verla, para correr a encontrarle, llevando botella, refresco y, ansias… A ver que pescaban pues. La mujer tendría como 36 años de edad, mis compañeros como 20.

Al pie de la cuesta, 30 pasos adelante, 2 de mis camaradas se regresaron. Y el que, en aquel momento fue calificado como el más listo. Volvió junto con la güera a tomar el camino de la sierra. ¿A dónde más? En aquel lugar lo que no era rio, sierra era.

No eran horas de la mañana, tampoco de tarde. Solo era medio día…y que pensar, ¿que la güerita llego solita a xichu, sin nadie de compañía?…. ¿que tenía 12 años de edad y por lo tanto no tenia compromiso de mujer con nadie?… ¿que subió a una lomita en la sierra para comprarse un trago en una barra que por ahí tenia años de existir? -eso de plano es ser bobito- …así como nosotros los vimos subir y les vimos bajar, otras decenas de ojos también lo vieron. Solo que a nosotros, fue a quienes toco cargar con el muerto.

Cuando bajaron de la lomita, en la sierra. La güerita y el chambelán se fueron a pasear por la pequeña feria. -Que pinches ocurrencias de muchacho-. Cuando lo despanzurraron, supuestamente nos buscaba… como no, si era obligado querer contarnos de su aventura. Desconociendo que en la sierra, una güera bonita, medio alcoholizada, puesta y dispuesta a todo, obviamente ya tiene dueño, y el acercarse a ella es jugar con la muerte.

Antes de la atardecida. A un lado del rio, a un ladito de la sierra. En esos caminos que se hacen llamar calles. Una camioneta, se dijo, con placas de Guanajuato, envistió al chambelán por la espalda. Dijeron que le paso por encima 3 veces. De talón a cabeza, de cabeza a talón, de talón a cabeza.