DE FONDO
Fernando Díaz de León Cardona
Todo Indica que existe un enorme interés por conocer e interpretar los términos de la iniciativa presidencial que limita a los parientes acceder a algún cargo de elección popular. De entrada, la propuesta de la presidenta Claudia Sheinbaum tendría efectos a partir del año 2027.
Si esto es verídico, la teoría del divorcio entre el gobernador José Ricardo Gallardo Cardona y la senadora Ruth Miriam González Silva no se produciría, al igual que la eventual candidatura del expresidente municipal Ricardo Gallardo Juárez, debido a la línea de consanguinidad entre ambos. Ciertamente el panorama a mediano plazo es complejo.
Por otro lado, lo que habrá que distinguir puntualmente es que, una cosa es la reforma constitucional propuesta, y, la otra, es quien y como habrán de definirse las candidaturas. Estos amarres, generalmente se dan entre las dirigencias partidistas y los gobernadores con las instancias federales.
No basta con que el Ejecutivo Federal instruya al INE para que en San Luis Potosí sea una mujer la abanderada, sino habría que esperar a conocer la postura de los partidos políticos; concretamente que se proponen hacer el PVEM y MORENA que, si bien es cierto conservan una alianza en las Cámaras, en el estado las relaciones políticas son tensas.
Inferir que la Reforma Constitucional lleva dedicatoria, tal vez sí, pero no será únicamente para San Luis Potosí. En el 2027 habrá renovación de gubernaturas en 16 entidades del país. El que deba ser una mujer la candidata en la tierra del Potosí, es hasta ahora una especulación.
Si esto fuera real, muchos resultarían perjudicados, – entre ellos, José Guadalupe Torres Sánchez, Juan Ramiro Robledo, Gerardo Sánchez Zumaya, Gilberto Hernández Villafuerte, Juan Manuel Navarro, y Juan Carlos Valladares, entre otros, incluso al propio Enrique Galindo si la pretensión de MORENA de postularlo fuera real.
Tampoco significa que le estén limpiando el camino a Rita Ozalia Rodríguez, en tanto que, su hermana es la actual secretaria de Gobernación y no dejaría de interpretarse como un acto de poder y nepotismo. En todo caso, el camino estaría preparándose para la propia Rosa Isela. En fin, cada uno con sus enjuagues y estrategias, lo cierto es que esto abre frentes y varios escenarios.
Si El Pollo decide jugarle las contras al centro, entonces la expulsión del PRI de Enrique Galindo y las aspiraciones repetidas de la líder del tricolor Sara Rocha Medina, tienen sentido.
Si para San Luis Potosí deberá ser una mujer, nadie debería descartar una alianza PRI-PT-PVEM, ya en otros tiempos se ha rubricado y han ganado, al menos en el contexto federal.
Por otra parte, de las 15 gubernaturas que se disputarán, MORENA tiene 12 y conserva interés en Chihuahua y en Querétaro, aunque la joya de la corona sería Nuevo León. Se advierte difícil y lo es. Querétaro es un estado tradicionalmente panista y Nuevo León no lo va a soltar fácilmente el MC.
¿Hasta dónde existe en MORENA un interés real por San Luis Potosí? pocos lo saben.
Puesto en perspectiva, Gallardo tendrá que establecer alianzas sólidas e ir tejiendo fino con su propia gente para el momento propicio. Trabajo en el estado lo hay; disciplina y respeto hacia el gobierno federal existe. Eso nadie se lo puede regatear.
Esta coyuntura podría servir de marco de referencia a la dirigencia nacional del PVEM y a la propia presidenta de la República que bastante ocupada andará por conservar la mayoría en las Cámaras de Senadores y de Diputados en donde obviamente tiene su interés en que se mantenga la alianza con el Verde y el PT para lograr las reformas que desee.
Sobrado o no, el gobernador Gallardo afirma tener en el PVEM al menos 10 candidatos que podrían repetir la hazaña del 2021. Aquí el problema sigue siendo MORENA, la injerencia de Gobernación, sus verdaderas intenciones y la indefinida voluntad de la presidenta de la República.
Por lo demás, el Verde cuenta localmente con estructura y una base sólida para competir.
En síntesis, el gobernador aparentemente no necesita vejigas para nadar, sin embargo, el propio Gallardo no descarta una alianza con MORENA y, en cuanto al PRI, si la candidatura debe recaer en una mujer, habría que ver su viabilidad, en política todo puede suceder.
Hasta pronto