“Podrán no estar de acuerdo con lo que escribo pero no me podrán negar el derecho constitucional que tengo para decirlo.”

Un gobierno débil el de carreras.

Simón Hernández

Lo dicho en colaboraciones anteriores en relación a la debilidad de este gobierno se confirma con el sinnúmero de temas que están en crisis. La falta de obra pública, seguridad social, educación, seguridad y otros rubros de gobierno brillan por su ausencia. A casi la mitad de sexenio no se siente ni se vislumbra un buen futuro para San Luis Potosí.

Lo registrábamos en colaboraciones anteriores, que el gobierno que encabeza Juan Manuel Carreras López llegaba al poder con un escaso capital político, pues el triunfo obtenido sobre el Partido Acción Nacional de poco más de 20 mil votos no le da el sustento democrático para gobernar con contundencia.

Se creía que ante esta realidad electoral, la secretaria general de gobierno encargada de la política interna pondría a trabajar las estructuras con que cuenta el gobierno potosino, suscribiendo acuerdos con partidos políticos, organizaciones sociales, grupos políticos y demás para recobrar la credibilidad de la sociedad potosina pero no ha sido así, y el distanciamiento entre gobernantes y gobernados-como dice José Alfredo Jiménez-«es cada día mas grande”.

En este gobierno no ha habido concertación ni dialogo, ni mucho menos equipo de trabajo, tal parece como los mismos colaboradores quisieran llevarse al baile a Carreras López. Y a decir verdad, esta teoría no es nada descabellada, pues las principales secretarias del gobierno obedecen a otros intereses particulares y no al mandato del gobernador.

Es decir los grupos de poder en la capital tienen secuestrado a San Luis Potosí, de ahí que no hay una sintonía plena entre ciudadanía y gobierno. Vaya ni siquiera hay un liderazgo claro del gobernador en el interior del congreso del estado y cada quien hace lo que le viene en gana y para colmo esta legislatura está en el descredito como una de las legislaturas más inepta y corrupta.

Es obvio que ante todas estas observaciones el desgobierno en San Luis se ve a todas luces, siendo el tema más  alarmante -el de la inseguridad-que alcanzado índices muy altos.

Ante la ineficacia de un  gabinete que no da una, de un congreso que navega a la deriva y del clamor de la sociedad que exige justicia social se oyen voces en la huasteca, zona media, altiplano e incluso en la capital del estado  de la renuncia voluntaria de Juan Manuel Carreras, lo que sería catastrófico para San Luis Potosí y de su partido político en el que milita si se toma en cuenta la proximidad de las elecciones que ya están  a vuelta de la esquina, sin duda un gran costo político.

Lo más delicado de todo esto, es palpable y visible, el rompimiento con el partido político que gobierna a más de la mitad de los potosinos, me refiero al PRD, craso error del gobierno en turno.

Con el tiempo daremos cuenta lo que en esta colaboración se consigna.