¿El Notario les concederá el perdón a los criminales?
Solo algunos le conceden al Notario borrachín más virtudes que defectos o debilidades. Lo privilegian, le adoran y hasta aplauden su retórica, como aquella, la de Pito Pérez, ¿se acuerda? Todavía no inicia su campaña político-electoral como candidato a la Alcaldía capitalina por MORENA pero ya nos dio sus primeros apuntes.
Va con todo y contra todo en lo que a su etílico juicio y real parecer debería modificarse. Ese será el tono de su discurso y sin duda será un alimento puro y apetitoso para el mundillo mediático. El Notario Público ya enjuició, ya proceso y ya sentenció a quienes dice él: “Solo Dios sabe que significa el Gallardismo.”
La incógnita es, si su discurso y estrategia de campaña será igual, semejante o parecida y a tono a la de Andrés Manuel López Obrador. Si es así, el Notario deberá estar consciente y dispuesto a abandonar la leyenda del navismo para entrar en contextos diferentes y en una fiera y desigual batalla en contra de quien se anticipa, no le sabrá ni a sopa de melón su pelea por la Alcaldía.
Este tigre de papel; si es que recurre y se ajusta a los ideales y lineamientos discursivos del Peje, tendrá que retractarse de lo que dijo en su primera entrevista cuando anunció que se registraría por MORENA para contender por la presidencia municipal porque la ciudad estaba en manos criminales.
Para no contraponerse al discurso de MORENA, de entrada tendrá que replantear y dar fe pública si el perdón pronunciado por López Obrador para amnistiar a los criminales es solamente un protocolo de acuerdos ficticios o reales o si en verdad será un testimonio notariado para así cumplir con su promesa de campaña.
En sus delirium trémens o mejor dicho en sus tremendos delirios, el Fedatario ve a una ciudad capital abandonada y destruida; con un Ayuntamiento, según su parecer, en medio de la corrupción. Desafortunadamente todos esos males antes no los vio, ni cuando gobernó el PAN y mucho menos cuando lo administró el PRI porque tal vez muchos de los asuntos, trámites o triquiñuelas, vaya usted a saber que, se resolvían o se fraguaban en Notarías Públicas seleccionadas que dejaron de tener el privilegio de ganar.
Por otra parte, la incursión del Notario en la política ya metió al presunto heredero del navismo en tremendo pedal, porque si Leonel Serrato apela o litiga el socorrido discurso de la anticorrupción y el de la dignidad, ese de dividir a los potosinos en dignos e indignos o en buenos y malos, entonces la cosa ya se le jodió a Xavier Nava, porque literalmente lo dejaría sin bandera por no decir sin calzones.
Con su decisión de participar, a los rescoldos del navismo no les causó mucha gracia la inscripción del Notario para contender por la presidencia municipal, ¡Pos como que su orador incendiario y favorito de las trifulcas del 91, se fue por la libre!, si aquí el único y legítimo heredero es Xaviercito y nadie más, lo dicen ellos.