·        El seguimiento con madres se hace más intenso a partir de la semana 28 checando mediante ultrasonidos  para ver el desarrollo del bebé.

·        Hasta el momento se tiene buena cobertura en este segmento de la población y no han presentado ningún problema.

Un cuadro de zika se caracteriza por presencia febril, a veces puede haber exantema (salpullido), escozor, y en algunas ocasiones se presenta un cuadro de conjuntivitis, y aunque es una enfermedad de curso benigno la mayoría de las veces, hay que tener seguimiento sobre todo con embarazadas, no tanto por el riesgo en ellas, si no en sus pequeños.

Así lo informó el Subdirector de epidemiología de la Secretaría de Salud, doctor Marcelo Aranda, explicó que el Zika puede afectar no tanto a la madre, quien usualmente cursará por la enfermedad sin problemas, pero hay que darle especial énfasis al pequeño en el vientre y detectar.

“Lo ideal es que las madres embarazadas en la huasteca que presenten un cuadro de fiebre o salpullido, acudan a su unidad o centro de salud para realizarles su prueba de zika, a fin de descartarles. Si las encontramos con prueba positiva, les damos un seguimiento cada quince días, mediante brigadas mater, y ultrasonido después de la semana 28 para descartar anomalías en el menor”, aclaró el epidemiólogo.

Marcelo Aranda dijo que hasta el momento se tiene una muy buena cobertura en madres embarazadas con esta prueba, reportándose sin problemas los 63 casos presentados.

Dio a conocer que el Zika no ha causado ningún deceso en todo el país, y las madres embarazadas este año y el pasado, han pasado su embarazo sin problemas, lo que nos habla de un buen control epidemiológico de la Secretaría de Salud con ellas.