La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural indicó que San Luis Potosí ha recibido la mayor compensación en la operación de los seguros Agrícolas Catastróficos y Directo en Atención a la sequía.
La Dependencia explicó que en atención a los productores afectados por el fenómeno de la sequía, en el país se han ejercido 536 millones 116 mil 601 pesos, a través de los seguros Agrícola Catastrófico (SAC).
Detalló que bajo las nuevas modalidades de reactivación en el sector rural —como la recuperación de la capacidad productiva—, al 4 de octubre se tienen reportadas 917 mil 939 hectáreas establecidas con aviso de siniestro –en 25 entidades— con un valor de mil 399 millones 153 mil 481 pesos de suma asegurada.
La dependencia federal expuso que en el país se tiene un registro de 26 estados afectados por algún grado de sequía, con mayor impacto en los productos maíz, frijol, avena, trigo panificable y cebada, además de falta de suplemento alimenticio para ganado. Se han emitido declaratoria de desastre natural en San Luis Potosí y Durango.
La Subsecretaría de Agricultura de la Sader precisa que en la operación de los seguros Agrícola Catastrófico y Directo en Atención a la Sequía se han indemnizado 93 mil 821 hectáreas (ha) con 140 millones 823 mil 601 pesos: San Luis Potosí ha recibido la mayor compensación con 47 millones 765 mil 160 pesos por 31 mil 843 ha, seguido por Puebla con 44 millones 355 mil 420 pesos (29 mil 570 ha), Veracruz con 32 millones 900 mil pesos (21 mil 933 ha) y Tamaulipas con nueve millones 664 mil 270 pesos (seis mil 443 ha).
En San Luis Potosí hasta el mes de agosto han pagado más de 37 millones de pesos del seguro catastrófico a productores afectados por la sequía.
El apoyo ha sido entregado en los municipios de Ébano, Lagunillas, Ciudad Fernández, Venado, Rioverde, Moctezuma, Tamuín, Soledad de Graciano Sánchez, Santa María del Río, San Luis Potosí, Matehuala, San Vicente Tancuayalab, Gadalcazar, Cerritos, Cedral, Salinas.
El objetivo de este seguro es resarcir parcialmente los daños ocasionados por efectos climatológicos como sequía, inundaciones, arrastres o granizo, y que los productores recuperen parte de la inversión para continuar con su actividad.