Pese a la existencia un buen número de candidatos registrados para contender por la gubernatura del estado y por la presidencia municipal capitalina, en realidad la atención ciudadana estará centrada únicamente en seis personajes, a los demás; el potosino de a pie, los considera “patiños, empaque o relleno” como resultado de su escasa presencia y bajo nivel de competitividad.
En el camino, seguramente algunos de los contendientes se desinflarán, otros, muy probablemente declinarán en favor de alguno de los candidatos de las tres principales opciones representadas en las coaliciones integradas por el PAN-PRI-PRD-PCP; por la conformada por el PVEM-PT o por MORENA. Todo dependerá del desdoblamiento de las campañas, pero sobre todo del momento oportuno y circunstancia en que habrá de definirse el “voto útil”.
Por el momento, al margen de encuestas y mediciones cuchareadas, pagadas u oficiosas, el interés está centrado en tres principales aspirantes al gobierno del estado: En Octavio Pedroza Gaitán, en Mónica Liliana Rangel Martínez y en José Ricardo Gallardo Cardona. En ellos, los potosinos estarán depositado el destino de San Luis Potosí a partir del 6 de junio de este año, en nadie más.
La misma circunstancia se presenta en la contienda por el Ayuntamiento de la capital que representa en porcentaje un importante número de votos que habrán de sumar y capitalizar los aspirantes a la gubernatura. En el contexto capitalino, evidentemente la pelea por la presidencia municipal estará entre Enrique Galindo Ceballos; entre Leonel Serrato Sánchez y entre Francisco Xavier Nava Palacios que participa por la reelección para el período 2021-2024.
En municipios importantes como Soledad de Graciano Sánchez, las candidaturas de Juan Carlos Velázquez por la coalición PAN-PRI-PRD-PCP; la de Elizabeth Torres por MORENA; de Paola Arreola por el PMC y del PANAL con el ex alcalde Roberto Cervantes Barajas, podrían representar el fin de la hegemonía política si entre ellos encuentran puntos de coincidencia para armar un frente común que cambie el destino en la tierra de las enchiladas.
Leonor Noyola del PVEM es una buena candidata, sin embargo, el resultado que obtenga dependerá en gran medida de una reinvención del gallardismo y del cumplimiento de compromisos que adquirió la administración encabezada por Gilberto Hernández Villafuerte y por el ahora alcalde Gerardo Zapata, del cual, – bien a bien, no sabemos si siga fungiendo como jefe de prensa del PVEM o simplemente sea el encargado de un changarro al que difícilmente le encontrará cuadratura al círculo.
ENTRE PARENTESIS
Para algunos analistas serios como Oswaldo Ríos, la inclusión del presidente del CDE del PRI Elías Pesina Rodríguez, en la planilla municipal de Enrique Galindo Ceballos, es una muestra de humildad y muy al margen de la pretensión o la ambición política que otros líderes de partido han mostrado. Puede ser, pero si Elías fue quien se fajó y tuvo que tragar sapos y acatar instrucciones en los acuerdos internos de la coalición “Sí por San Luis Potosí”; en nuestra opinión, – debió mínimo, ser postulado para una diputación local plurinominal, se la merecía por su lealtad demostrada al Güero Carreras.
El augurio se cumplió
“Ojalá mi estimado Elías, que, este ca..marón, no te utilice únicamente para armarle la estructura priista y generarle condiciones favorables para entregar la gubernatura a un candidato ajeno al PRI.” Así de clarito se lo dijeron en la comida que le organizaron los priistas, previo a su llegada a la dirigencia estatal del tricolor; y pues sí, finalmente así fue. O Elías lo sabía o le dieron el avión.
Choque de trenes
En el entrón que se están dando Leonel Serrato y el enviado de Mario Carrillo; el senador suplente Alejandro Rojas Díaz Durán, lo más probable es que este último salga por piernas y no aguante la lengua viperina del Notario.
Lamentable presagio
El atentado contra el dirigente de la COPARMEX, Julio Cesar Galindo Pérez, no vaticina nada bueno. Hasta ahora, no hay nadie capaz de amarrar a los demonios sueltos.
Hasta pronto
