Dejo una administración con finanzas sanas y con menos deuda

No solo cumplimos con nuestros compromisos, sino que rebasamos las expectativas

Mi gobierno rompió paradigmas que parecían infranqueables e indestructibles

Nuestro trabajo estuvo siempre apegado a la legalidad

Ni la obra pública ni los programas sociales se vieron frenados por pagar las deudas que otros dejaron

Al rendir su tercero y último informe de gobierno al frente del Ayuntamiento de la capital, Ricardo Gallardo Juárez, aseguró que a tres años de distancia, con orgullo y satisfacción puede informar a las y los potosinos que su mandato no solamente cumplió con los compromisos adquiridos en 2015, sino que rebasó en mucho las metas y las expectativas que se crearon hace tres años.

Dijo que su gobierno se propuso desde el inicio de su administración, desafiar al tiempo, trazar objetivos, alcanzar metas y romper con paradigmas que parecían infranqueables o indestructibles. “Los escenarios adversos y llenos de complejidad financiera nos emplazaron a enfrentar grandes retos y a zanjar brechas para alcanzar los propósitos de gobierno”, manifestó.

Resaltó, que gracias al apoyo solidario de los potosinos se cumplieron los objetivos de su gobierno, “lo hicimos siempre apegados a la legalidad, con principios de honestidad, austeridad, contención del gasto, con transparencia y rendición de cuentas” expreso Gallardo Juárez al tiempo de señalar que organismos internacionales, nacionales y locales, colocaron al municipio capitalino en el primer lugar de las evaluaciones.

Recordó, que para nadie fue un enigma la situación y las lamentables condiciones en que recibió la administración municipal. “El desastre financiero que mi gobierno encontró, producto este de herencias del pasado, puso en grave riesgo la estabilidad financiera toda vez que hubo un manejo deficiente e irresponsable en la contratación de líneas de crédito.”

Ricardo Gallardo, agregó que no obstante esa condición de desventaja, hoy se puede afirmar que se actuó responsablemente porque su gobierno no solo fue capaz de enfrentar una pesada deuda pública contraída por administraciones pasadas, sino que con voluntad, visión y firmeza se trabajó con decisión para no paralizar la actividad del gobierno y mucho menos frenar la obra pública o los programas sociales que beneficiaron a miles de potosinos.

Con la frente en alto, con las manos limpias y con dignidad, “podemos afirmar que al término de nuestra gestión, se entrega una administración con finanzas sanas y menos deuda, con comportamientos estables entre el ingreso y el egreso, con mayores capacidades institucionales y con un marco normativo ajustado a las exigencias que impone la dinámica social y el crecimiento mismo de una ciudad que por la indolencia del pasado fue por años  abandonada y olvidada”, apuntó.