El candidato presidencial por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, visitó este día San Luis Potosí en donde tuvo una reunión con la estructura de Morena en el estado, y posteriormente con el sector empresarial del estado; en entrevista con los medios locales aseguró que aunque va a ser difícil que sus adversarios hagan fraude electoral, Morena se está preparando para defender sus votos.
Destacó que va haber mucha manipulación, pero aseguró que la ciudadanía está muy despierta, ya no se le puede engañar al pueblo, actualmente se encuentra 20 puntos arriba en las encuestas a nivel nacional; hizo referencia una encuesta que se le presentó sobre la intención política en el estado de San Luis Potosí en donde aseguró que Morena está más de 10 puntos arriba, lo cual calificó como «un fenómeno» pues estos puntos reflejan el crecimiento de Morena y del proyecto que él encabeza nivel nacional.
Asimismo señaló que inclusive en la capital tienen buenos números así como en los distritos locales y federales, «en San Luis Potosí no se puede engañar a la gente porque aquí ya gobernó el PRI, ya gobernó el PAN, y es lo mismo, no hay ningún cambio, entonces la gente aquí en San Luis Potosí quiere el cambio», dijo.
López Obrador comentó que en esta ocasión no van a poder hacer fraude porque es mucha la gente que está apoyando a Morena, explicó que se esta hablando de más de 20 puntos de ventaja que representan casi 10 millones de ciudadanos de ventaja; aunque tampoco descartó que no haya fraude porque la historia de México dicta que siempre ha habido fraude electoral «no podrían pero de todas maneras hay que decirles porque son muy ambiciosos y no quieren dejar de robar, no tienen llenadera».
Finalmente en cuanto a que el Presidente de México, Enrique Peña Nieto, ha dicho que no va a intervenir en las elecciones señaló que le da «el beneficio de la duda», dejo en claro que nunca se ha reunido con Peña Nieto, a diferencia de Ricardo Anaya que aseguró ha intentado pactar con Peña Nieto, por lo que negó que está postura de Peña Nieto de no intervención electoral sea porque haya alguna especie de acuerdo con él, más bien es «un guiño» para que se dé una transición política tranquila, pues importa mucho que se respeten los votos y no existe fraude.
