* Jóvenes y familias dejan sus parcelas por la pobreza y desempleo: CIOAC.
Toño Martínez
Uno de los ejemplos más claros y contundentes de la migración interna en México es el sistema agropecuario Pujal-Coy, donde la pobreza, falta de empleo y nulo respaldo oficial para productores del sector social, provocan un éxodo incesante de jóvenes hacia diversas entidades ciudades o los Estados Unidos y la tierra, está quedando solo en manos de ancianos que ya no pueden trabajarla.
Esta es la realidad, pero permanece invisible para el discurso oficial donde hacen creer que todo está bien, pero cuyas consecuencias serán de resultados impredecibles, señaló Pedro González Gómez, coordinador regional de la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC).
Hoy, dijo, muchas de las tierras que algún día fueron de campesinos e indígenas como patrimonio para generar producción y bienestar, estan ociosas; quedando en manos de ancianos porque no hay relevo generacional que las explote, porque los hijos prefieren alquilarse en empresas como las empacadoras de carne, en las cementeras y termoelectricas para sobrevivir ya que no tienen otra forma de hacerlo.
Otros exponen su vida intentando llegar a Estados Unidos como indocumentados pero los deportan. Los que logran trabajar en la clandestinidad, envían dinero a sus familias para ayudarlos a vivir o mejorar su casita, pero es muy frágil.
Pedro González mencionó que el gobierno presume falsamente que primero los pobres y que los campesinos están mejor que nunca pero no es cierto porque les retiró programas de apoyo.
El sector social agrícola y ganadero necesita semillas, fertilizantes, maquinaria, repoblación del hato ganadero, insumos; que se les garantice el agua en lugar de solo proporcionarla a industrias como Gusi.
Este gobierno que se dice igualitario es más neoliberal que los anteriores porque está generando mas ricos y haciendo a los grupos vulnerables más pobres.
González Gómez puso como ejemplo de las fallidas políticas públicas hacia el campo, que cada vez depende más de las importaciones de granos para alimentar al pueblo. En este momento tiene que comprar sobre todo a Estados Unidos 23 millones de toneladas de maíz, y todavía se pone la presidenta Sheinbaum a pelear con Donald Trump por las medidas que está tomando para mejorar su país, en lugar de ponerse a ver como aumentar la producción nacional y resolver los problemas nacionales.
En Pujal-Coy fueron repartidas 30 mil hectáreas de tierra a grupos campesinos pero son las que están abandonando o rentando a consorcios.
La emigración en esa zona crece y aumentan tierras ociosas y los gobiernos federal, estatal y hasta los municipales tienen que ponerle inmediata atención antes de que se convierta en una catástrofe, advirtió el líder de la CIOAC Pedro González Gómez.