Nos invaden los ingleses y los canadienses
¿No le parece a usted que es una burla, un insulto o una vil mamada, esa que dicen los responsables de la seguridad de que el Reino Unido (Inglaterra) al igual que Canadá, vieron al estado de San Luis Potosí como un sitio seguro, una entidad que se puede visitar sin problema alguno y que no es necesario se le incluya en la Alerta de Viaje?
¿Sabe usted querido lector cuantos ingleses o cuantos canadienses visitan o radican la ciudad de San Luis Potosí y sus 58 municipios? Le aseguro que no se tiene el dato, y si existe alguna idea de cuantos güeros, ingleses y canadienses llegan o son residentes en nuestro estado no sea ingrato, pásenos el tip, porque solamente en la mente de los funcionarios de gobierno existen cifras de muchos visitantes.
La inmensa mayoría de turistas canadienses o ingleses, sí viajan a México, pero regularmente lo hacen por aire y sus destinos son puertos como Acapulco, Cancún, Manzanillo, Puerto Vallarta, Ixtapa, entre otros, así como ciudades consideradas como pueblos mágicos, como Zacatecas y Guanajuato, pero no San Luis, ¡por favor¡
Y conste que no nos referimos a los extranjeros provenientes o residentes de Alemania, Francia, China, Corea o Japón que forman ya una gran comunidad empresarial por virtud de las inversiones instaladas en la zona industrial. Dios nos libre que esos países decreten algún día la alerta de viaje para San Luis Potosí porque entonces si se pondría bien cabrona la cosa.
Pero creo que a nuestras autoridades les mueve no solo lo que digan los Meade o lo que haya dicho el padre Peñalosa, sino que les angustia el que no encuentren la rendija o el camino para salir del barranco en que se encuentra la seguridad en San Luis Potosí. ¿A poco pensaban que con el cambio de Guitierritos por Pinedita las cosas cambiarían? ¡Que esperanzas! y ¡Qué ilusos!
La situación de inseguridad, demostrado está, es altamente compleja. Y lo será mientras persista la simulación, la mentira y el engaño de que se trabaja para enfrentar y combatir la delincuencia.
Los hechos recientes en los que se han registrado ejecuciones, asaltos bancarios, feminicidios, robos a negocios, sustracción de cajeros automáticos y otras linduras, es una escalada imparable; imposible de resolver mientras todo se circunscriba a regaños o llamaditas de atención por parte del gobernador, porque visto está que a los jefes policiacos les vale madre todo y lo que diga el mandatario más.
Ya es tiempo de que despierten y reacciones. Si Juan Manuel Carreras tiene una pizca de interés en recuperar confianza y credibilidad, un buen planteamiento sería que comience ya a explorar y aterrizar la idea de crear una Escuela Superior para formar policías de carrera, NO institutos ni academias rabonas, sino una institución que forme policías en el nivel de una profesión respetada, con verdadera vocación de servicio.
Si esto se logra, los técnicos o licenciados en seguridad pública, los profesionales de la prevención del delito o de la investigación egresarán preparados y tendrán la expectativa de actuar con ética y profesionalismo, además de tener un mejor ingreso y buenas prestaciones, es la oportunidad para iniciar con el relevo generacional que ya urge en las corporaciones de seguridad.