Por Rafael Aguilar Fuentes

La sanción o denuncia anunciada por el papa Bergolio señalando a dos arzobispos Potosinos de haber encubierto al padre Córdoba.

Ya lo sabíamos, nuestra iglesia católica se derrumba, implosiona ante sus mitos ante su corrupción ante su locura, sometida al poder político, en muchas comunidades ya ni siquiera hay misa.

Fueron las grandes familias de ricos Potosinos sobre todo Panistas los que callaron todo, y a la vez fueron víctimas.

Se habla de más de 100 muchachos violentados sexualmente por ese asqueroso sodomita.

Que de seguro buscaba venganza por lo que le hicieron de joven o de niño, son víctimas de víctimas.

Las decenas de muchachos eran confesados hasta en moteles, esto es intolerable tiene que ser aprendido el padre Córdoba por el daño que hizo, por los traumas que dejó.

En una ocasión el ingeniero Guillermo Pizzuto Zamanillo me comentó que él y otros Navistas fueron a ver al arzobispo Morales Reyes para decirle que era un escándalo los abusos sexuales de este sacerdote.

Dicen que el arzobispo solo guardó silencio:

«son cosas que hay que tolerar» les comento.

Y no merece la comunidad católica y cristiana ser condenada en su conjunto, y obviamente que no todos los sacerdotes son así, pero es una maldita estupidez conservar el aparente celibato, es antinatural los judíos o los rabi, los musulmanes los sintoístas los budistas en todas las religiones los pastores sacerdotes o guías se casan o tienen parejas.

¿A dónde va la iglesia católica viviendo en la edad media encubriendo sus abusos sexuales?

Traumando generaciones.

Dios es un Dios de amor de perdón y de sacrificio no de estupideces no de fetichismos pobrecita iglesia y pobre San Luis.

Hace 20 años ingresaban al seminario mayor más de 1000 jóvenes hoy no hay ni 100.

Siendo un poquito cruel deberían de poner un letrero que diga:
«bienvenidos a la escuela de pederastia»

Ojalá detengan al padre Córdoba y sea castigado aunque en el fondo con nada paga lo que le hizo a esos jóvenes y tampoco los gobiernos Pristas y Panistas que todo callaron con razón los Panistas son como son, algunos digo.

Por último.

Tengo un amigo de hace 50 años que trabajó como intendente en el asilo o albergue que está en Pozos llamado San Juan Bosco, dice que presenció abusos de sacerdotes a niños sobre todo a huérfanos de una manera traumática asquerosa e inarrable.

Dice que guardó silencio para evitar que lo corrieran, hoy hasta llora cuando narra los hechos:

» fui un cobarde mi Chiquilín»

Y exactamente ha sido la cobardía de la sociedad y de las autoridades esta orgía y conspiración de los silencios.

No feliz domingo.

Es cuanto