Prudente posponer resultados de la Revisión de Cuentas Públicas

Seguramente habrá a quienes no simpaticen o no les parezca la postura del diputado del Partido Acción Nacional PAN, Héctor Mendizábal Pérez respecto a que los resultados de las más de 100 Cuentas Públicas del 2016, que revisa un despacho contable contratado por la Auditoría Superior del Estado ASE, se den a conocer hasta después de las elecciones de julio de este 2018.

¿Políticamente fue sensata, coherente y prudente la decisión de posponer y enterar de sus resultados una vez que transcurra, se desinflen los ánimos y se legitime el proceso electoral de este año? Sí, definitivamente sí, de otra manera, cualquier indicio de presuntas irregularidades en las más de un centenar de entidades públicas del gobierno del estado, del poder judicial, de los municipios o de las dependencias de administración pública delegada, podría politizarse y desencadenarse una guerra de alcances impredecibles.

Es sensato, porque con esta determinación de aplazar los tiempos hasta después del primero de julio, para eventualmente revelar hallazgos encontrados en la Revisión a las Cuentas del 2016, es definitivamente una postura responsable del Poder Legislativo que no concede margen a que grupos que se han empeñado en denostar, capitalicen y utilicen probables resultados adversos de una instancia gubernamental para golpear a las instituciones a sus adversarios políticos.

Es prudente posponer esto, porque aun cuando no se han iniciado formalmente las campañas político-electorales, existen evidencias claras de posturas intransigentes que no buscan se aclaren posibles

inconsistencias, sino que tienen el claro interés político de destruir, confundir y confrontar a la sociedad potosina, esa es la lamentable realidad y cualquiera lo advierte.

Los potosinos en su mayoría, están conscientes de que la elección constitucional que arrancará formalmente con candidatos registrados y aceptados en uno o dos meses más, serán unos comicios complejos y difíciles. La lucha interna y externa que se vive en estos momentos entre los partidos políticos y sus principales actores, dan cuenta del grado de complejidad, se tal manera que si no se tiene cuidado en el tratamiento de algunos temas, esto podría salirse de control, y por supuesto que a nadie conviene.

Si se coloca en perspectiva, la sociedad no es ajena ni está ausente de lo que ha venido sucediendo con las cuentas públicas de las administraciones municipales (Victoria Labastida Aguirre) 2009-2012 y (Mario García Valdez) 2012-2015. Está enterada de que se presentaron irregularidades y de que existen denuncias fundamentadas, pero no por ello ha existido la atingencia o la voluntad para darles cause y resolver.

Creo que la decisión del Congreso del Estado, de aplazar tiempos y dar a conocer resultados de lo que arrojen las revisiones a las Cuentas Públicas 2016 hasta después del proceso electoral fue acertada, porque abona y contribuye a que se desarrolle un proceso electoral en paz y sin la contaminación de intereses de tribunales mediáticos inquisitorios que desearían ver fuera del gobierno o en prisión a quienes sienten o ven como sus adversarios políticos.