El verdadero trasfondo de la candidatura
independiente de Xavier Nava

La inscripción de Xavier Nava Palacios como candidato independiente para contender por la Alcaldía de la capital, pareciera a simple vista un acto de incongruencia, incluso es inaceptable o deshonesto para los mortales electores que lo primero que se cuestionan es: ¿Qué credibilidad puede tener alguien que representa a un partido como diputado federal y que un buen día soñó, amaneció y despertó queriendo ser presidente municipal?

El argumento que podría esgrimir, es que él no es miembro o militante de Partido de la Revolución Democrática PRD, y que su incursión en 2015 fue a título y condición de candidato ciudadano. Xavier Nava, negará, como ya lo hizo, que su arribo a San Lázaro no fue producto de la inercia Gallardista, es más, se esfuerza sin éxito, de sembrar la idea de que fue su figura y herencia que presume lo que contribuyó al resultado del 2015, nada más ridículo que eso.

Todo lo anterior es lo que públicamente trasciende, se registra y se difunde en medios formales y redes sociales. Aquí el secreto es tratar de escudriñar ¿qué es lo que realmente motivó a este muchacho a presentarse como un Judas dentro el PRD?, ¿que lo llevo a traicionar y separarse de la corriente que lo hizo diputado? Su línea argumentativa podrá ser amplia, pero en el fondo hay otras intenciones externas que no son propiamente las de Xavier Nava.

Desde el ámbito del poder público, desde el congreso del estado, desde las dirigencias de algunos partidos políticos, y desde algunas Cúpulas empresariales o algunos de sus miembros, y desde varias organizaciones sociales mercenarias, se emprendió una guerra en contra los Gallardo en la que se advierte el afán desmedido de debilitar, aniquilar, reducir o destruir un proyecto político; una guerra que asumieron desde hace tiempo no como una lucha política en buena lid, sino como algo perverso y muy personal.

No es casual o fortuito, que en algunas reuniones interpartidistas en la ciudad de México, uno que otro empresario, constructores o desarrolladores que se sienten afectados en sus intereses y que no comparten la forma de gobierno en la capital del estado, hubiesen estado presentes en los acuerdos para que el PAN pudiera abanderar la candidatura de Xavier Nava.

Los partidos políticos solo son el instrumento que podría dar legitimidad, pero son ellos, esos potentados los que siempre vinculados a intereses partidistas han utilizado y financiado a auténticos golpeadores y sicarios para denostar en público y en privado el proyecto Gallardista. Baste observar la saña con la que se actúa y se divulgan comentarios y sandeces en dos o tres medios formales y en las redes sociales para darse cuenta.

Utilizado y ajeno a intereses ocultos, otros no tanto, Xavier Nava, dio un salto al precipicio.

Atrás de la gran conspiración se mueven piezas, mucho dinero y perversas intenciones que buscan debilitar un proyecto político con la fe y la esperanza de regresar a gozar de los privilegios y de las bondades del poder que siempre disfrutaron y de la impunidad en la que todavía se desplazan algunos.