24.7 C
San Luis Potosí
spot_img

Coincidencias con MORENA

spot_img

Entérate

Últimas Noticias

jueves, abril 25, 2024

Por: Rafael Aguilar Fuentes

Estamos totalmente de acuerdo con la propuesta de Morena de quitarle dinero a la clase política. Los civilistas, los navistas lo hemos exigido durante más de dos décadas. Hace 10 años Alianza Cívica a través de Sergio Aguayo Quezada hizo una campaña nacional por todo el país llamada 50% menos. Los motivos. El congreso del estado, no asume la responsabilidad que le da la constitución y el voto ciudadano para legislar en pro de uno de los anhelos más sentidos de la sociedad potosina. Ponerle un freno a los partidos políticos, en su afán de poder y dinero a cualquier precio porque si no, nada cambiará. Y es que los diputados y sus partidos fueron el mayor obstáculo para aprobar una reforma electoral, constitucional y política que sea útil y digna al pueblo. Los partidos y sus diputados aprueban en el congreso todo tipo de cargas, como la del precio al agua potable, el predial, la antigua tenencia hoy simulada en otros cargos y más dinero a sus partidos y campañas, bloquean la transparencia y el cogobierno de la sociedad, con deformaciones y requisitos insalvables . Nunca intentan realmente ser autónomos de los poderes reales del estado, allí mandan los «jaloneos » políticos de los poderosos. Las campañas electorales de sus candidatos son eterno mamotreto que se repite día a día, lo mismo, siguen cobrando su abultada dieta pero reducen lo contemplado para salud, gasto social, programas asistenciales para los más débiles, asilos, asociaciones que combaten las adicciones, eso sí, nunca aprueban la reducción de dinero a su presupuesto. Esta borrachera de millones los perpetua en el usufructuó de nuestros recursos.

Se niegan a democratizar sus institutos políticos, despilfarran nuestro dinero y no quieren acompañar en sus apuros económicos y caminar junto a la sociedad en su anhelo por transformarse. No habrá reforma electoral que sea construida ni consensuada por la sociedad si no se aprueba la reducción de recursos al oneroso modelo político. Si no aprueban la revocación del mandato y se abre el poder político a la ciudanía. Lo estamos pidiendo y no escuchan, las reformas que ha aprobado el congreso son solo una obligada y mala copia de las reformas federales. Por el contrario, cada trienio y sexenio se aumentan los dineros. Nunca intenta el congreso local innovarla ni adecuarla de manera consciente y responsable. No se buscan mecanismos de auténtico acceso ciudadano para renovar o dignificar a nuestro sistema electoral. Pues este ha demostrado su inutilidad como instrumento eficaz que acote el poderío de los partidos. Los actuales organismos electorales son solo la oficialía de partes de los políticos. Es más, ni siquiera se simula para sostener la falacia de que somos vanguardia nacional en leyes electorales, al grado que el sistema electoral potosino no le sirve al sufragio limpio y bien intencionado de quienes votan por opciones minoritarias que buscan la democracia con escasos recursos, aquí casi siempre gana el dinero y las elecciones de estado. Que mientan y mal gobiernen y roben, no podremos evitarlo ¡Pero con menos dinero carajo! Esta es la más urgente demanda ciudadana que no quiere escuchar el congreso.

Exigimos una reforma electoral que contemple la reducción del presupuesto público a la clase política, tanto dinero fácil, a la mayoría les destruye la poca moral que tienen, los envicia, los vuelve locos, más perversos y mentirosos, no se mueven de las dirigencias partidistas y las usan para quedarse con los puestos de elección popular que puedan negociar en el caro e inútil circo electoral al que nos someten.

Por ejemplo,: Oscar Vera, por 23 años, dueño del pequeño partido negocio llamado Conciencia Popular, el cual ya logró su registro en el 2018 al prometerle al PRI, 25 mil votos en la capital cuando hace 3 años ni siquiera sacaron un regidor en Soledad que fue donde nació ese partidito. Los” Titos” y Belmares del Partido del Trabajo; Eugenio Govea del Naranja etc. etc. Estos eternos dirigentes, a los militantes más inexpertos los usan y reprimen y estos a la vez aprenden las mañas y mentiras de sus líderes, obedecen la reglas y lo primero que les queda claro, es que para llegar al poder, hay que prestarse y rebajarse a todo. Crecen en la consigna de que, la sociedad es manipulable, creída y estúpida, que solo sirve para dar votos y dinero, en este panorama, las relaciones entre los líderes partidistas que se enquistan en el poder y en los cargos públicos se envilecen y se corrompen ante la militancia, la sociedad y la prensa, obteniendo gran experiencia en mentir y manipular, lo que les resulta perversamente útil para brincar de un puesto a otro. Los partidos y sus legisladores piden transparencia en gobierno e instituciones pero se resisten con uñas y dientes a la rendición de cuentas y a transparentarse ante la sociedad, al grado que, resulta más fácil investigar la pederastia en las iglesias que auditar y multar a un partido político pues ellos eligen quien debe fiscalizarlos. Los diputados no quieren abandonar la errática función gestora, clientelar que hacen y los mantiene en permanente campaña política, aparte de su sueldo ejercen un gasto millonario que gastan a discreción. No sabe la sociedad como se autorizan viáticos gastos de representación, gestoría social o apoyos “parlamentarios” que pueden justificar hasta en una servilleta en donde un supuesto “beneficiado” acepta de puño y letra a veces ilegible que recibió tal o cual cantidad. El congreso negocia las cuentas públicas pero cuando le conviene, castigan y auditan a quienes quieren, exigen a gobiernos e instituciones que liciten y concursen todo gasto pero nunca el de ellos. ¿Si a san Luis Potosí se le reconoce como vanguardista en la aprobación de leyes electorales, por qué no impulsan reformas ejemplares, congruentes con nuestra fama de avanzado” civilismo” electoral? Y es que las reformas que han aprobado no se ocupan de fortalecer los instrumentos legales e institucionales para que los partidos se aboquen y volteen hacia la ciudadanía, las reformas electorales quedan cortas porque no quieren promover un sistema electoral y partidista equitativo, eficiente, justo y sobre todo austero. El congreso y sus reformas no son incluyentes con la sociedad. Solo refrendan los intereses de la partidocracia, que condena a San Luis Potosí a ser gobernado por embusteros, expertos gestores de los intereses de los grupos de poder y del narco que invierten dinero para sus campañas, con millonadas que nadie fiscaliza . Ellos son los delincuentes que están hundiendo a México.

Para colmo.

Ya empiezan a calentar motores para meternos en su show electoral del 2021. Sus actos y lenguaje público serán verdaderas funciones de carpa, preparan la escena en la que por mil medios hartaran a los ciudadanos con sus peroratas y falsedades. Lo hacen de forma tan natural que para gran parte de la sociedad ya es tradición y resignación.

Pero la peor burla que hacen estos embaucadores profesionales que mantenemos, es que si logran apropiarse de la esperanza de los sectores más ignorantes de la sociedad, tocan sus puertas con hipócrita entusiasmo para jurar que combatirán la pobreza, defenderán a las mujeres y a todos de la corrupción, delincuencia y todo mal que les aqueje, pero realmente sin apoyar en nada. Prostituyen palabra y promesa y rebajan la actividad política hasta la náusea. Reparten regalitos, no asistencia social permanente. Pueden fingir y llegar a llorar en sus mítines para obtener el voto y, si no les funciona, montan campañas de miedo y la compra de votos. Como desgraciadamente lo vimos en el proceso electoral pasado, compraron votos, aterrorizaron a la sociedad, la dividieron sin ningún remordimiento o conciencia de las luchas que se dieron en San Luis Potosí.

Hemos llegado al grado que desde un regidor hasta el presidente de la república ya son la clase política más cara del mundo. Cada vez nos cuestan más sus campañas y cargos públicos y todo para que se vuelvan más cínicos y ambiciosos. Para un politiquito «moderno» en campaña, la sociedad es un ente idiota que solo dar votos y dinero a manos llenas. El «chiste » es que abría de convencerla una vez más. Seguiremos en la mediocridad, ni memoria histórica ni congruencia solo mas simulación atraso y saqueos es lo que nos darán los diputados si no logramos modificar las fuerzas políticas al interior del poder legislativo. Y es que a través de sus leyes y partidos, han sido una carga terriblemente cara que fastidia e indigna a la sociedad, aparte de su absoluto control de los organismos disque autónomos. Debemos de exigir la creación de una contraloría electoral ciudadana, que audite y fiscalice las campañas realmente en el momento que se desarrollan. Hacerlo meses después no tiene caso, no pueden estar en la misma mesa el conteo de votos, de multas y de dinero. La insaculación de los consejeros electorales propuestos por la sociedad exclusivamente, que si no hay campañas que no haya dinero. La adecuación del plebiscito y referéndum como instrumento real de los ciudadanos, la revocación del mandato, la aprobación de la ley “antichapulin”, la adecuación o ley secundaria del referéndum no nos lo darán los grillos vividores del congreso. En Europa, Argentina y en Colombia le llaman democracia participativa directa. Pero aquí no. Aquí, todo lo someten a una boleta electoral con votos que impugnan, compran, condicionan o se roban. Que si él candidato no cumple sus promesas, se largue del puesto.

De una vez por toda la aprobación de un sistema local de medios de impugnación que contemple el interés jurídico de los ciudadanos en casos específicos de uso de recursos públicos para promover demandas y recursos electorales que fiscalicen a los partidos. Que si el candidato tuvo malas cuentas en su manejo del recurso electoral que no se le entregue la constancia de mayoría. En fin. Promover con lo que se tenga y con lo que se pueda una fuerza ciudadana que actué con imparcialidad y por la austeridad e independencia, para que el congreso deje de ser un mal ejemplo de repugnancia social. Que los procesos electorales, queden independientes de los eternos y perversos grupos políticos locales que están convencidos de que todos tienen un precio. La mayoría de los políticos y sus partidos suponen que ya no hay dignidad ni valor ciudadano, que soportamos y olvidamos todo, no es posible que el sueño de la democracia haya muerto, hundida víctima del dinero fácil y en el uso de las guerras sucias. Por un congreso libre austero y responsable. No es posible que el sueño de la democracia haya muerto con la desaparición física de Salvador Nava Martínez, el cual hoy su legado es negocio de perversos y miserables gerentitos de la política.

spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
%d bloggers like this: