Grecia comenzó este jueves a vacunar contra la COVID-19 a los refugiados y solicitantes de asilo acogidos en los campos de las islas del Egeo, según confirmó hoy el ministerio de Migración heleno.

Las inoculaciones comenzaron este mediodía de forma simultánea en los campos de las islas de Lesbos, Quíos y Samos, en el epicentro de la crisis de refugiados desde que en 2016 dejasen de ser lugar de paso como entrada a Europa con el cierre de la ruta de los Balcanes y la firma de la declaración conjunta de migración UE-Turquía.

Según confirmó el ministerio de Migración, personal de la Organización Nacional de Salud Pública (EODY) acudirá a vacunar a los campos, en los que viven más de 9,000 personas, cada jueves y viernes.

Al igual que la mayoría de la población isleña griega, los refugiados recibirán la vacuna monodosis de Janssen.

Al contrario que en la vacunación de la población general, en los campos de refugiados del Egeo no se priorizará a ningún grupo de edad, sino al que muestre interés en la inoculación.

El secretario general para la recepción de solicitantes de asilo Manos Logothetis ha asegurado que sólo el 15 % de la población refugiada ha mostrado interés en vacunarse contra el coronavirus y se ha mostrado seguro de que la inmunidad de este grupo poblacional se alcanzará rápidamente porque “el 30 % tiene menos de 18 años y otro 30 % ya ha estado infectado”.

Además, hoy comienza la vacunación a domicilio de los refugiados que están alojados en pisos en Grecia continental, mientras en los campamentos del continente comenzó a mediados de mayo y sigue en marcha.

La situación epidemiológica en Grecia mejora lentamente y, mientras las autoridades han registrado un descenso en los fallecimientos por COVID, la campaña de vacunación continúa avanzando.

Hasta ahora en Grecia se han realizado 5 millones 791 mil 280 vacunaciones y casi el 22 % de sus alrededor de 10 millones de habitantes ha recibido ya las dos dosis de las vacunas contra la COVID-19.