DE FONDO

Fernando Díaz de León Cardona

Para el Partido Acción Nacional PAN, el actual alcalde Enrique Galindo Ceballos debería reelegirse, es más, “hasta lo apoyaría porque está haciendo bien las cosas”. La insinuación, cachondeo o abierta intención albiazul no es mala, pero habría que esperar a ver que dice el PRI que es donde Galindo tiene su ombligo comprometido.

Ciertamente Enrique Galindo logró la presidencia municipal por obra de la Coalición “Sí Por San Luis Potosí”, ha hecho bien su chamba, pero nadie en su sano juicio puede aventurarse a afirmar que fue solamente gracias al PAN que llegó. Simplemente porque Enrique estuvo inmerso en una coyuntura que favorecía a Octavio Pedroza, pero nada más, no se confundan.

El que el PAN pudiese apoyar la reelección del alcalde, esa no es la litis, dirían los abogados, porque hoy por hoy, Acción Nacional se encuentra sin pies ni cabeza. Dividido, fracturado y padeciendo todavía de esa cena de negros a la que están acostumbrados a vivir en tiempos electorales.

Enrique Galindo en un hombre sensato, calculador e inteligente y, lo primero que debería plantearse es si está en el ánimo del gobernador para reelegirse, porque si no es así, la fuerza gallardista le hará la vida imposible y le arrancará al PAN y al PRI su último reducto que es la presidencia municipal, simplemente porque no tienen otra.

En público y en privado, El Pollo José Ricardo Gallardo Cardona, se ha cachondeado a Galindo, lo apoya, lo eleva, lo reconoce y hasta una camiseta, gorra o chamarra verde le anda fletando, peeeero de eso a que esté realmente en su ánimo y en sus afectos, yo tengo mis dudas. Gallardo tiene muy claro cual es su proyecto y no es, lamentablemente Galindo su apuesta, a menos que abierta y públicamente expresé que el Verde y Gallardo son su proyecto.

Si Enrique Galindo sabe sortear bien sus pretensiones, seguramente que mal no le irá. Es un político con oficio y un buen presidente municipal. A muchos ha ayudado y favorecido, incluso hasta soportado., principalmente a los funcionarios o representantes del PAN que sienten y hasta creen que su posición se las debe a ellos.

Si Galindo sabe jugar bien sus canicas, el alcalde tendrá todas las posibilidades de continuar, pero si se equivoca u otros lo llevan por el camino equivocado, seguro que enfrentará la furia de los Gallardistas que quieren el espacio. De él y de nadie más dependerá su futuro político. Ya en alguna ocasión, decía que, si no se le da la reelección, Enrique sería un excelente Secretario de Seguridad.

Si en el PAN están pensando que con la reelección de Galindo, muchos de los burócratas que pululan en la administración tendrían su chamba asegurada, estarán cometiendo un grave error. Por principios, por ética y por todos los valores morales que defienden los panistas, deberían ir buscando un candidato idóneo y no colgarse del primer priista del estado, digo.

Hasta pronto