Fernando Díaz de León Cardona
La negativa de Xavier Nava Palacios y de Sonia Mendoza Díaz, de suscribir un pacto de unidad en el Partido Acción Nacional PAN, en vísperas del proceso interno en el que habrá de seleccionarse al candidato del partido blanquiazul a la gubernatura del estado, no presagia nada bueno y desde ahora se advierte ya un rompimiento inminente.
Las razones de su renuencia a firmar un compromiso de unidad partidista son evidentes. El alcalde capitalino con licencia sabe perfectamente que a escasos días de una definición interna en un partido al que no pertenece, la militancia panista no está de su lado y, todo apunta, a que la balanza podría inclinarse en favor del ex senador de la República, Octavio Pedroza Gaitán.
Obviamente que la declinación de Sonia Mendoza Díaz, en favor del alcalde capitalino con licencia, tiene, aparte de un tufo económico interesado, la intención de reventar un proceso interno que la dirigencia local de Acción Nacional viene conduciendo bien. En este escenario, se inscribe la negación de firmar el pacto de unidad y, no dudemos, que logren desestabilizar al panismo, pues recursos de dudosa procedencia destinados a su campaña sobran.
Si finalmente Xavier Nava y Sonia Mendoza, deciden llegar hasta el final de la contienda interna, es decir al 10 de enero próximo, la votación será cerrada no tanto por la decisión del panismo potosino, sino por los intereses políticos y económicos externos infiltrados y que están jugando un papel importante para sostener esa candidatura. Por otro lado, de no resultar favorecido en la elección interna, tanto Xavier como Sonia se quedarán literalmente huérfanos.
La única opción política que ambos tendrían, es buscar el cobijo perredista para seguir en la contienda, – separados, – eso sí, de la coalición “Si Por San Luis Potosí”. Si se mueven en ese escenario de ruinas y cenizas de lo que queda del PRD, seguramente habrán cavado su tumba política, incluso, sin la mínima posibilidad de reelegirse en la alcaldía capitalina.
Si Xavier Nava se conduce con inteligencia, debería estar mejor pensando en regresar a su oficina para tratar de recomponer el cochinero que está dejando en la alcaldía. Es lo mejor para él si no quiere sufrir las consecuencias del cuarto año. El presidente municipal se ha ganado a pulso el rechazo y la condena de sectores sociales y económicos importantes a los que sienten y dicen les falló.
ENTRE PARENTESIS
En cualquier momento salvo reconsideraciones importantes, saldrá humo blanco de la sede del CEN de MORENA en donde se anunciará el nombre del candidato al gobierno del estado. Habrá seguramente pucheros de quienes no resultaron favorecidos y argumentarán que las encuestas fueron cuchareadas. A Mario Delgado se le irán a la yugular, pero de ahí no pasará.
Y mientras el PAN se desmorona y se dan con todo, en el PRI la maquinaria se sigue aceitando para seleccionar a un candidato competitivo y que pueda medirse con el que surja de Acción Nacional. En perspectiva y con posibilidades reales de llegar a la convención sigue firme el Secretario de Educación, Joel Ramírez Díaz. El ex Comisionado de la desaparecida PFP, Enrique Galindo Ceballos no oculta su interés y, Luis Antonio Mahabub la sueña y la caricia.
Con buena ventaja, El Pollo Ricardo Gallardo, de la coalición PVEM-PT, continúa cabalgando y sigue adelante en las encuestas. Algunas, por cierto, centaveras, pero las condenadas bien que le han atinado en otros procesos. En fin, ya falta menos y solo no hay que comer ansias ni desesperarse.
Hasta pronto
