Con la participación de poco más de 30 mandos medios y superiores de la Dirección General de Seguridad Pública Municipal (DGSPM) de Soledad de Graciano Sánchez, el Instituto de las Mujeres del Estado (IMES) impartió la capacitación «Perspectiva de Género en la Función Policial», que busca fortalecer el marco jurídico municipal, así como garantizar el respeto a los derechos de hombres y mujeres, en un ambiente de igualdad.

El evento estuvo presidido por la directora general del IMES, Érika Velázquez Gutiérrez, y el Director General de la DGSPM, Gustavo Arredondo Mata, así como la titular de la instancia de las mujeres en el municipio de Soledad, María Alicia Martínez Rodríguez, quienes felicitaron a los participantes por sumarse a esta iniciativa, orientada a favorecer la construcción de relaciones equitativas, promover la igualdad de oportunidades, y desarrollar una cultura de no discriminación.

El taller, con una duración de 5 horas, estuvo a cargo del maestro Alejandro Ortiz Hernández, Director de Atención Ciudadana del IMES, quien sostuvo que desde su área se reconoce la gravedad de todos los tipos de violencia, tanto contra hombres como contra las mujeres, aunque resaltó que ésta última acusa particularidades que no deben de omitirse, y que requieren un abordaje distinto, hacia lo cual se enfoca la capacitación impartida.

Por ello hizo notar la necesidad de incorporar este enfoque diferenciado entre agentes policiales y sus mandos medios y superiores, ya que a todos ellos y ellas les toca atender llamadas de urgencia por situaciones de violencia que generalmente se registran en el espacio íntimo, y a manos de sus propias parejas.

Ante este panorama de la sociedad mexicana, se busca que los policías municipales del vecino municipio de Soledad reconozcan que trabajar con las víctimas, y trabajar con la violencia de género, es reconocer ésas diferencias, así como sus características particulares,  a fin de que desarrollen cierta sensibilidad y habilidades, y que reconozcan que la violencia contra las mujeres se da por la existencia de una serie de ideas vinculadas a un sistema patriarcal.

Con base en ello, la policía debe actuar dentro del marco de la perspectiva de género, y no responsabilizar a las víctimas por la violencia que viven, ya que aún siguen apareciendo comentarios de que las mujeres sufren violencia en respuesta a algún tipo acción realizada por ellas para ser violentadas en consecuencia, con lo que se busca justificar ese tipo de acciones.