La titular de la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental del Gobierno del Estado (Segam) Ivette Salazar Torres explicó que la protección de la sierra de San Miguelito que solicitó el gobernador Juan Manuel Carreras al presidente Andrés Manuel López Obrador, abarca 63 mil hectáreas porque es el área prioritaria.
Expuso que según el estudio técnico de factibilidad que realizó el Instituto Potosino de Ciencia y Tecnología (IPICyT) en conjunto con la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, por medio de la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (Segam) abarca 63 mil hectáreas, por tal motivo, la solicitud de veda forestal para la protección, preservación y restauración se delimita a esta superficie, aunque no se descarta la posibilidad de expandirla.
“La Sierra de San Miguelito pertenece al desierto chihuahuense son más de 640 mil kilómetros cuadrados, incluye varios estados es decir es una porción nada más de un área que es susceptible que se puede considerar como prioritaria”.
Dijo que estas 63 mil hectáreas no significa que sea la superficie única, “significa que es la prioritaria donde hay águila real, donde hay especies que son endémicas tanto de flora y fauna, se puede hacer más amplio, este estudio nada más incluye estas 63 mil como área prioritaria quisiéramos que fuera una primera etapa y no seguirlo pausando porque si nos 80 mil o son 90 mil, empezar por 63 mil, las otras 20 mil se puede hacer un estudio técnico de factibilidad complementario para ir creciendo la sierra”.
Asimismo detalló que en el estudio que se elaboró se cuenta con la anuncia de aceptaciones. “Es bien fácil que la ciudadanía exija que se protejan 80 mil hectáreas pero nadie considera que tienen dueño y por eso se ha trabajado en buscar la aceptación y anuencia de los propietarios”.
Señaló que para un propietario implica restricción del uso de su tierra ya que tiene que destinar su zona únicamente para actividades de conservación y turismo bajo, por lo que es necesario que se les ofrezcan recursos para que los ejidatarios estén convencidos de proteger.
“Les podemos dar un fideicomiso para que en lugar de vender les podamos dar más dinero de lo que los empresarios les pueden dar por venderlo”.
