Si no ocurre nada extraordinario, este miércoles se estará llevando a cabo la reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores CONAGO en tierra potosina. Para Juan Manuel Carreras López, presidente en funciones de un organismo emergente envuelto de claroscuros desde su creación, podría ser la joya de la corona justo a un año de que concluya su mandato.

Todo parece indicar, que los temas más relevantes de la agenda están bien planchados. Pandemia, Reactivación Económica y Reforma Fiscal serán lo temas torales que los 32 mandatarios expondrán al presidente Andrés Manuel López Obrador. El Güero tendrá la oportunidad de lucirse y no tiene de que preocuparse, mucho menos sudar por calenturas ajenas o de otros.

Los sobresaltos o prietitos en el arroz que pudiesen surgir vendrán de los integrantes de la Alianza Federalista de Gobernadores en contra de AMLO y nada más. De los 32 mandatarios estatales que asisten a la reunión que ha levantado polvo, grandes expectativas, augurios y especulaciones de un encontronazo con el presidente de la República, 15 de ellos ya se van el próximo año al renovarse la titularidad del poder ejecutivo en sus estados.

La mayoría de los gobernadores que dejarán el cargo el próximo año, 8 del PRI, 4 del PAN, 1 Independiente, 1 de Morena y 1 del PRD, ya no querrán comprarse un boleto ajeno con el gobierno federal. Ellos ya no quieren queso ni desean obtener algo extraordinario. Todos, sin distingo preferirán terminar bien para dormir tranquilos el séptimo año; están a tiempo para ordenar sus cuentas, de lo contrario los riesgos serán mayúsculos y la persecución será implacable.

Por otro lado, si la autodenominada Alianza Federalista de Gobernadores, en su mayoría integrada por mandatarios panistas, pensaba que San Luis Potosí sería el foro para reposicionar sus proclamas, resulta evidente que sus intenciones se verán disminuidas, pues 5 de los 9 gobernadores de la Alianza en contra del Presidente están inmersos en el grosero escándalo de los moches que presuntamente recibieron cuando fueron Senadores de la República para que se aprobara la Reforma Energética de Enrique Peña Nieto.

¿Que podrían argumentar o refutar mandatarios como José Rosas Aispuro de Durango; Carlos Martínez Davis de Baja California Sur; ¿Martín Orozco de Aguascalientes? ¿el de Tamaulipas Francisco Javier García Cabeza de Vaca, a quien señalan de ser autor o cómplice en la operación y financiamiento de la campaña legal en contra de las iniciativas presidenciales?

O bien, ¿Con qué cara podría salir el gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez Servien; involucrado también en el escándalo de los moches o de ser presunto protector de su Secretario Particular al que balconearon flagrante este lunes recibiendo paquetes gordos de billetes que se repartieron entre Senadores y Diputados que aprobaron la Reforma Energética?

¿A poco creen que vendrán a San Luis Potosí a armar su desmadre mediático, y de paso darle uno que otro rozón al gobernador potosino que al menos se ha esmerado en caminar en la vía de la institucionalidad? Para nada. El presidente AMLO no se está chupando el dedo y seguramente la filtración del video-escándalo de los moches se hizo pensando en uno de los posibles escenarios de la reunión de la CONAGO.

Si acaso, los gobernadores de la Alianza Federalista que también incluye a los gobernadores de Jalisco, Guanajuato, Coahuila, Colima, Aguascalientes y Michoacán, pertenecientes al PAN, al PRI, al PRD y al PMC; buscarán y tratarán de arrinconar a sus sparrings; aunque, como siempre, ya los veremos defendiéndose como gatos boca arriba, es decir, a Hugo López Gatell y a Arturo Herrera, de Hacienda, principalmente en los temas de la pandemia, la reactivación económica y el pacto fiscal, ya se verá.