SSeguridad Pública tema pendiente.

En el tema de la seguridad pública San Luis Potosí reportó un repunte en los delitos patrimoniales, y en homicidios  en lo que va del presente año, lo cual ha estado aún más ensombrecido con los recientes feminicidios que han ido en aumento, algunos con una dosis de violencia muy alta.

A inicios del 2017 se sumaron a las tareas de persecución de delitos las Fuerzas de Reacción Inmediata (FRIM) con el fin de atacar delitos en la zona metropolitana de la capital y Soledad de Graciano Sánchez, lo que al inicio generó al menos una buena señal de que las cosas marcharían bien con una adecuada coordinación a nivel  federal, estatal y municipios, sin embargo a la fecha las cifras dicen otra cosa.

La manifestación de grupos feministas y de la sociedad en general que empieza darse cuenta del preocupante fenómeno de los feminicidios, es una señal de hartazgo y un reclamo generalizado que supera cualquier argumento dado por las autoridades para tratar de minimizar los efectos de esta ola delictiva, no sólo porque los eventos aumentan sino porque están caracterizados en ocasiones por un nivel de brutalidad que no se puede tolerar.

Más aún los incidentes han tocado esferas cercanas al poder que han experimentado por cuenta propia esta situación, lo que hace pensar que nadie en esta sociedad está exento de ser víctima de la delincuencia  y lo peor aún que no existen garantías de que quienes denuncian  obtengan justicia plena ante al cargado universo de casos que la Procuraduría del Estado debe perseguir.

Algo importante tendrá que pasar en términos de los resultados que deben reportar las instancias preventivas y de persecución del delito o esta exigencia ciudadana crecerá significativamente; lo más fácil sería atender el llamado de diversos sectores como el empresarial que ha señalado la necesidad de generar cambio en los mandos, sin embargo en los hechos tiene que verse un efecto real y una percepción  de lo que  las cosas mejoran.